Uno larguito,
dos más bajitos,
otro chico y flaco,
y otro gordazo.
más adivinanzas del cuerpo humano...
¿Quién seré yo que encerrada soy donde quiera que voy, me encuentro siempre mojada y al cielo pegada estoy.
Tengo un tabique en el medio y dos ventanas a los lados por las que entra el aire puro y sale el ya respirado.
Cueva con treinta y dos machacantes que dispone de un solo habitante.
Dicen que son de dos, pero siempre son de una.
Laterales parapetos, que van siempre por parejas, les encantan los secretos.
Atrás panza y delante espinazo, aciértamelo pedazo de ganso.
A muchos se lo suelen tomar si antes no se ha ido a pelar.
En la jirafa descuella, bajo la barba del rey, lo tiene cualquier botella, la camisa o el jersey.
Con ella vives, con ella hablas, con ella rezas y hasta bostezas.
Unas son redondas, otras ovaladas, unas piensan mucho, otras casi nada.