Una palomita,
blanca y negra;
vuela sin alas
y habla sin lengua.
más adivinanzas de libros y escritura...
Aunque sea tan pequeño, siempre separo y siempre detengo.
Con sus páginas abiertas te va ilustrando la mente, si alguna vez lo prestaras, lo perderás para siempre.
Corta bien y no es cuchillo, afila y no es afilador, y te presta sus servicios para que escribas mejor.
Entre mis hojas se esconden hadas, princesas y duendes. Cuando me lees de noche, sin darte cuenta te duermes.
Por dentro carbón, por fuera madera, en tu maletón voy a la escuela.
Sabana blanca tendida, mariquita negra le baila encima.
Muy chiquito, chiquitito, que pone fin a lo escrito.
Tengo hojas sin ser árbol, te hablo sin tener voz, si me abres no me quejo, adivina quien soy yo.
Campo blanco, flores negras, un arado, cinco yeguas.
Blancos son los campos, las semillas negras, cinco son los bueyes que el arado llevan.