Son mis fichas amarillas,
rojas, azules y verdes,
si las comes y las pillas,
tu te cuentas hasta veinte.
más adivinanzas de juegos y juguetes...
Sólo una faja es mi vestido, cuando me lo quitan arranco a bailar. Pies y manos no tengo, pero a los más jóvenes entretengo.
Cubo que seis caras tiene, veintiún puntos en total, en el «Parchís» interviene y en la «Oca»... pues igual.
Veintiocho caballeros, de espaldas negras y lisas, delante, todo agujeros, por dominar se dan prisa.
Once jugadores del mismo color, diez van por el campo, detrás de un balón.
Es un bonito juego: tu te vas y yo me quedo; cuento, cuento, cuento y luego voy a tu encuentro.
Me componen cuatro palos impresos en cartulina. Tengo reyes y caballos, seguro que me adivinas.
En un suelo de baldosas unas blancas y otras negras, luchan reyes y peones, caballos, torres y reinas.
¿Qué juego será, que aunque nos movamos siempre nos quedamos en el mismo lugar?
Un mundo de fantasía cargadito de ilusiones, despierta nuestra alegría entre tantas atracciones.
Un arco arriba y tú debajo; un arco abajo, pasas por encima.