¿Que le pones a una caja que la hace más ligera?
más adivinanzas de cosas de la casa...
Es verdad que tú le miras, es mentira que te ve, sois iguales uno al otro, está claro que eres él.
No soy el sol, tampoco el fuego; pero la casa bien que caliento.
Pino sobre pino, sobre pino, lino, sobre lino, flores y alrededor amores.
Lámina que no se ve y nos protege del viento. Aunque la atraviesa el sol, se empaña con el aliento.
Aunque al dormir me consultan, nunca suelo contestar.
Es una pera colgada que toda la casa alumbra sin tener humo ni llama.
Ruedo y ruedo, y en los bolsillos me quedo.
Tiene luna, no es planeta; tiene marco y no es puerta.
De nada me sirven, estas cuatro patas, que quieta estoy siempre, sobre mí, el durmiente.
Cuando la entrada yo les prohíbo, son muchos golpes los que recibo.