Pequeña como una pera
y alumbra la casa entera.
más adivinanzas de cosas de la casa...
Al nacer fui maltratada, mi dueño me tiene amor, y aunque soy mujer honrada, me suele tener atada y con guardas mi señor.
En un cuarto me arrinconan sin acordarse de mí, pero pronto van a buscarme cuando tienen que subir.
Soy liso y llano en extremo, y, aunque me falta la voz, digo en su cara a cualquiera la más leve imperfección; contesto al que me pregunta sin lisonja ni aflicción, y si mala cara pone, la misma le pongo yo.
Muy bonito por delante y muy feo por detrás; me transformo a cada instante, pues imito a los demás.
Es una caja habladora, que vive en todas las casas, y se calla a muy alta hora.
Durante el verano escondido, en el invierno encendido.
Muchos golpes recibe cuando a la gente, la entrada prohíbe.
Yo tengo calor y frío, y no frío sin calor, y sin ser ni mar ni río, peces en mí he visto yo.
Un animalito con cuatro dientes, que nos trae comida muy diligente.
Un campo bien labrado no gasta reja ni arado.