Cuando me caliento hasta los talones
aliso camisas y pantalones.
más adivinanzas de costura y plancha...
De mi ojo cuelga un hilo largo, que une las telas y hace las prendas.
Pequeños, redondos, con agujeritos, valemos muy poco, solos o juntitos, mas de nosotros depende el buen vestir de la gente.
Tengo pie y no tengo boca, hilo meto, hilo asomo, tengo dientes y no como.
Pica, picando, colita arrastrando.
Soy alta y delgada, tengo un ojo, hago vestidos y no me los pongo.
Una cosa que no es cosa y lo es.
Dos hermanas diligentes que caminan al compás, con el pico por delante y los ojos por detrás.
Un pie grave, ardiente y plano, va dejando el campo llano y, al pasar, su calentura va dejando en la llanura.
Tan largo como un camino, proviene de vegetal, y a pesar de su extensión, en un cesto puede estar.
Y lo es, y lo es y no me lo adivinas en un mes.