Soy una caja adornada
con dos palos para sonar,
y en la banda de la escuela,
me puedes encontrar.
¿Qué soy?
Zumba que te zumba,
se oye mi son,
en las noches navideñas,
hasta que aparece el sol.
Con tan sólo cuatro cuerdas,
que un arco pone en acción,
esta caja melodiosa
te alegrará el corazón.
Marfil y madera fina,
a tocarnos con talento,
el que no sabe, no atina.
Mis caras redondas,
¡qué estiradas son!
a fuerza de golpes,
así canto yo.
Sobre una piel bien tensada,
dos bailarines saltaban.
Se toca con dos palillos,
sale siempre en la procesión
y es un instrumento de percusión.
En una larga abertura
tengo yo mi dentadura
y luego que empiezo a hablar,
todas mis piezas se mueven
sin poderlas yo parar.
Cien amigos tengo,
todos en una tabla,
si yo no los toco,
ellos no me hablan
Instrumento musical,
jaranero y redondico,
que todos saben tocar
del virtuoso al borrico
y que resulta esencial
si cantas un villancico.
Una niña tontiloca,
con la boca en la barriga,
y las tripas en la boca.
Brazos con brazos,
panza con panza,
rascando en medio,
surge la danza.
Yo tengo puesto de honor
en toda fiesta guajira:
cuando mis seis cuerdas pulsa,
el campesino se inspira
y su cantar yo acompaño
con mi dulce melodía,
desde que empieza el guateque
hasta que despunta el día.
A pesar de no ser buque
tengo cuerdas y atavíos,
también tengo un regio puente,
pero nunca he visto un río.
Me rascan continuamente
de forma muy placentera,
mi voz es muy bien timbrada
y mi cuerpo de madera.
Puedo ser alegre o triste,
según quien me toque esté:
con que me rasgues las cuerdas,
buen sonido emitiré.
Buenas y sonoras
cuerdas tengo;
cuando me rascan,
a la gente entretengo.
La habrás oído tocar,
piensa, medita, recuerda,
¿qué instrumento musical
no tiene más que una cuerda?
Con su gran boca
y un solo diente
desde lo alto
llama a la gente.
Entre pared y pared
hay una santa mujer
que con el diente
llama a la gente,
con las muelas
a las mozuelas,
con los colmillos
a los chiquillos.
Dama con pendiente
que toca deprisa
para que la gente
no pierda la misa.
Una vieja con un diente
que llama a toda la gente.
Soy bella, soy muy fuerte;
cuando hablo todos me oyen
y tengo un solo diente
que muevo constantemente