Cabezón y muy delgado,
que se pone siempre negro,
después de haber sido frotado.
más adivinanzas de cosas de la casa...
En un cuarto me arrinconan sin acordarse de mí, pero pronto van a buscarme cuando tienen que subir.
Dicen que quien lo tiene es muy gracioso, se sacude en la mesa contra lo soso.
Es una caja habladora, que vive en todas las casas, y se calla a muy alta hora.
Ya ves, ya ves, tan claro que es. No me la adivines de aquí a un mes.
¿Quién pensaréis que yo soy, que cuanto más y más lavo, mucho más sucia me voy?
Pino sobre pino, sobre pino, lino, sobre lino, flores y alrededor amores.
Un barbecho bien labrado, ni entra mula, ni entra arado.
Es verdad que tú le miras, es mentira que te ve, sois iguales uno al otro, está claro que eres él.
Los tejados protejo y buenas canales dejo.
En lo más alto me ponen para que el viento me dé, soy guía para los hombres y siempre estoy de pié.