Dos hermanos sonrosados,
juntos en silencio están,
pero siempre necesitan
separarse para hablar.
más adivinanzas del cuerpo humano...
¿Quién seré yo que encerrada soy donde quiera que voy, me encuentro siempre mojada y al cielo pegada estoy.
Enfundados siempre van y hay que tener cuidado con las patadas que dan.
Laterales parapetos, que van siempre por parejas, les encantan los secretos.
Tengo un tabique en el medio y dos ventanas a los lados por las que entra el aire puro y sale el ya respirado.
Porque no se caiga pagan, pero, si se cae, nadie se agacha a recogerlo.
Uno se cree superior, el otro inferior se siente, sin decirse nunca nada, mucho se quieren, tanto que, siempre se están besando.
¿Qué instrumento se puede escuchar, pero no se puede ver ni tocar?
Si aciertas esta pregunta, te anotarás un buen tanto: ¿qué cosa acabada en punta tienes entre risa y llanto?
Son dos cortinas en dos ventanitas que bajando ocultan dos niñas bonitas.
Adivina, adivinanza, tiene un solo ojo y una cara ancha.