Un barbecho
bien labrado,
ni entra mula,
ni entra arado.
más adivinanzas de cosas de la casa...
Un campo bien labrado no gasta reja ni arado.
Es tu favorita cuando sientes frío; la encuentras escrita en el verso mío.
Tiene agua y no es botijo, está siempre en el jardín. Cada vez que se enrosca, aunque no espanta a una mosca tiene pinta de reptil. ¿Qué será?
Muy bonito por delante y muy feo por detrás; me transformo a cada instante, pues imito a los demás.
Golpe va, golpe viene y en su puesto se mantiene.
En el buen tiempo a nadie marea, en cuanto llueve repiquetea.
En la mesa me ponen y sobre mí todos comen.
En el campo fui nacida, vestida de verdes ramas, y al pueblo me trajeron, para servir a las damas, a mí todo me regalan, caramelos, miel, melada, mas yo todo lo reparto, porque no sé comer nada.
Habla y no tiene boca, oye y no tiene oído, es chiquito y hace ruido, muchas veces se equivoca.
Es una caja habladora, que vive en todas las casas, y se calla a muy alta hora.