En el cielo soy de agua,
en la tierra soy de polvo,
en las iglesias de humo
y mancha blanca en los ojos.
más adivinanzas de la naturaleza...
En el campo soy hallada y al fuego alimento. Donde quiera que soy llevada, es para darme tormento.
Como el algodón suelo en el aire flotar, a veces otorgo lluvia y otras, sólo humedad.
Desde el día en que nací, corro y corro sin cesar: corro de noche y de día hasta llegar a la mar.
Girando toda su vida, toda su vida girando y no aprendió a ser más rápida da una vuelta y tarda un día, da otra vuelta y tarda un año.
Aparece por delante, por los lados, por la espalda, te descuidas un instante y te levanta la falda.
Alto, alto, como un pino, pesa menos que un comino.
Lomos y cabeza tengo y aunque vestida no estoy, muy largas faldas mantengo.
Soy una bola grandota, que gira constantemente, y que desea saber, dónde meter tanta gente. Si ya sabes quien soy yo eres muy inteligente.
Es una enorme naranja pero de zumo salado, los gajos se le suponen entre un par de meridianos.
Lleva años en el mar y aún no sabe nadar.