Sólo una faja es mi vestido,
cuando me lo quitan arranco a bailar.
Pies y manos no tengo,
pero a los más jóvenes entretengo.
más adivinanzas de juegos y juguetes...
Cómete la «e» y pon una «a». Mírala muy bien y échala a volar.
Con caras muy blancas llenas de lunares a unos damos suerte, a otros, pesares.
Es un bonito juego: tu te vas y yo me quedo; cuento, cuento, cuento y luego voy a tu encuentro.
Son mis fichas amarillas, rojas, azules y verdes, si las comes y las pillas, tu te cuentas hasta veinte.
Tengo cadenas sin ser preso, si me empujas voy y vengo, en los jardines y parques muchos niños entretengo.
Tengo caballos que suben y bajan, dan vueltas y vueltas y nunca se cansan.
Cuanto más y más lo llenas, menos pesa y sube más.
Cuando yo subo, tú bajas; si tú subes, bajo yo: a la misma altura nunca podemos estar los dos.
Bajo mi carpa gigante, acojo a chicos y grandes; payasos y trapecistas son típicos en mis pistas.
Si sumas uno más uno evidente que da dos, y si da dos te descubro dos veces la solución de este juego de salón.